El ENRE dictó ayer la resolución por la que autoriza el incremento de las tarifas para el servicio de agua y cloacas en un 209,23%. El incremento se aplicará en dos partes: un 100% comienza a regir a partir del primer bimestre de 2019. Es decir, que desde el 1º de enero rige el nuevo cuadro tarifario aunque el usuario lo pagará a partir de marzo. Además, tal como ocurre con el servicio de energía, la medición será bimestral pero la facturación será mensual.
La segunda parte del incremento comenzará a regir a partir del segundo bimestre de 2019 y representará un incremento del 54,61% sobre las tarifas vigentes en el primer bimestre de 2019, como es acumulativo, el aumento total será del 209,23%.
De esta forma, el ENRE aceptó parcialmente la propuesta de la empresa Aguas de Catamarca SAPEM, que en la audiencia pública del 26 de noviembre había solicitado un aumento del 245% y la consultora Sigla, que fue contratada por el ENRE, consideró que debería ser del 209%.
Por otra parte, la empresa presentó también una propuesta para la modificación del régimen tarifario mediante una reestructuración tarifaria. “El ENRE aprobó una reestructuración de las categorías del viejo cuadro tarifario, es una reestructuración transitoria hasta que se apruebe el nuevo régimen tarifario”, explicó Germán Nadal, director de Tarifas y Costos del Servicio Sanitario del ENRE.
Como lo informó El Ancasti, en la actualidad la empresa Aguas de Catamarca SAPEM mantiene una estructura que fue heredada de Obras Sanitarias Catamarca, que contempla 46 categorías. Son 27 para el servicio medido de agua y 19 para el no medido. «Había zonas en las que no se podía medir ni calcular cuánto era el consumo y por eso el cobro se basaba en valuación de la propiedad de los usuarios. Se obtenía una puntuación que era la base de la valuación», explicó Nadal.
Aquel sistema basado en los tipos de vivienda quedó desactualizado porque establece un cargo fijo igual para el que consume 10 o 50 metros cúbicos de agua.
“Con la reestructuración de categorías se logró bajar a la población de usuarios a 13 categorías, eso facilitaría el control y sería más fácil el seguimiento de los reclamos. Además, todos los usuarios van a pertenecer a un sistema medido”, explicó Nadal.
En este sentido comentó que si el usuario todavía no tiene medidor pagará un abono básico. “El compromiso de Nación con la empresa es proveer 3.000 medidores para comenzar con la campaña de colocación de medidores. En la actualidad, sobre los 75 mil usuarios, la empresa tiene el 56% de usuarios medidos y quieren llegar al 70% del padrón», agregó.
Conforme a los términos de la resolución, la reestructuración tarifaria entrará en vigencia a partir del 1º de mayo de 2019.
La resolución señala que a partir de la modificación del sistema de facturación y cobranza, la empresa necesita un tiempo para adaptar su sistema y además se precisa informar a los usuarios con la suficiente antelación de los cambios a introducirse, es por eso que se ordena que entre en vigencia en mayo de 2019.
Una de las inquietudes que se había planteado en la audiencia era la posibilidad de que la reestructuración de categorías implique un incremento posterior para algunos usuarios. «Se trabajó sobre ese tema y no tendrá impacto económico sobre los usuarios», explicó Nadal.
De todos modos, esta reestructuración transitoria de categorías estará en vigencia hasta que se apruebe el Régimen Tarifario Definitivo que se discute en las audiencias quinquenales.
La facturación del servicio de agua será mensual
Otro cambio que resuelve la resolución del ENRE es que con la nueva estructura tarifaria, que entrará en vigencia en mayo, se deberá desdoblar el cobro en dos facturas mensuales de igual monto, manteniendo el sistema de medición bimestral. Esto implica que tendrá el mismo régimen de facturación que ahora tiene la EC SAPEM.
Además, se establece que el prestador podrá, previa intimación, proceder al corte del servicio (reducción o interrupción) cuando se verifique una deuda impaga por más de tres períodos consecutivos o alternados.
Otro de los desafíos de la empresa es disminuir el alto nivel de morosidad. «Lo que se busca es reducir la morosidad. Hoy tenemos un 40% de morosidad y el régimen impide realizar algunas maniobras tendientes al cobro si no pasan 4 bimestres, es decir, ocho meses. Con el tiempo que corre esto representa un desfasaje importante y se busca reducir ese tiempo», había explicado uno de los gerentes de la empresa Aguas de Catamarca.