La ensalada caprese proviene de la Isla de Capri, Italia, país que simboliza la gastronomía local, particularmente por combinar los colores de su bandera, así como los sabores tradicionales de la zona. Esta ensalada, además de acompañar perfectamente pastas y pollo, puede ser un relleno perfecto para unas ricas empanadas de albahaca, tomate y queso. Asimismo, esta es la propuesta que tenemos para ti, sin embargo, en lugar de empanadas caprese clásicas o empanadillas caprese, queremos mostrarte cómo armar unas apetitosas y originales canastitas, así podrás disfrutar de los llamativos colores de la caprese. Ideales para aumentar el consumo de vegetales.
Empieza la receta de canastitas caprese cortando el tomate en cubos. Para ello, pélalo con un cepillo exclusivo para alimentos y córtalo, retirando las semillas, por el contrario, humedecerá demasiado la masa de tus canastitas mediterráneas. Reserva.
Lava las hojas de la albahaca y desinféctalas sumergiéndolas 15 minutos en una solución con 1 litro de agua y 1 gota de lavandina, apta para alimentos. Luego, escúrrelas para que estén bien secas a la hora de armar tu relleno. Resérvalas.
Corta el queso en cubos y pica las aceitunas. ¡Ya tienes listos los ingredientes principales de tus canastitas caprese!
Truco: si debes consumir alimentos sin sal, evita las aceitunas o enjuágalas antes de utilizarlas. Además, puedes escoger un queso sin sal.
Mezcla todos los ingredientes y resérvalos mientras enciendes el horno para que se precaliente a temperatura máxima, es decir, 200 ºC – 220 ºC.
Dispón las tapas de empanada en moldes para muffins, así mantendrán su forma de canastita. Si no tienes este tipo de molde, puedes utilizar la base de latas previamente lavadas y forradas con papel aluminio, cubriéndolas con las tapas. Solo en este último caso será necesario cocinarlas 5 minutos para que mantengan su forma y puedas rellenarlas más tarde.
Si utilizas moldes de muffins, puedes rellenar las canastitas y cocinar la tapa junto con el relleno. Caliéntalas unos 7 minutos en el horno, suficiente para que las tapas se doren y el queso se derrita.
Cuando pase el tiempo indicado, ya podrás disfrutar de estas canastitas de empanadas caprese. ¡A comer! Cuéntanos en los comentarios tu opinión y comparte con nosotros una fotografía del resultado final.
Por Micaela Demarchi